Buenos vecinos 2

Crítica de Luciana Boglioli - La Capital

Furia adolescente

Lidiar con un vecino complicado puede Lidiar con un vecino complicado puede llegar a ser una de las peores experiencias de la vida y es justamente en esta problemática tan común pero inquietante, en la que se sumerge “Buenos vecinos 2”. La película protagonizada por el comediante Seth Rogen, Rose Byrne y los ídolos adolescentes Zac Efron y Chloë Grace Moretz, es básicamente una disputa entre una familia conformada por un matrimonio y su pequeña hija y una fraternidad de adolescentes. Mientras la familia quiere mantener la calma para poder vender la casa, las chicas de la fraternidad sólo quieren divertirse. La guerra no tendrá tregua: desde fiestas interminables, pasando por episodios de robos y venta de drogas, y planes de último minuto. Todo será válido a la hora de defender el objetivo personal. Al mismo tiempo, el relato muestra las singularidades de la idiosincrasia norteamericana con la familia como bien preciado. Por momentos, el filme dirigido por Nicholas Stoller, sorprende por la crudeza de sus chistes sobre sexo y religión, divierte y entretiene con sus gags. Sin embargo no llega a ser más que eso, una película pasatista para entregarse a la risa y disfrutar con un pochoclo extra large.