Arturo: millonario irresistible

Crítica de Florencia Dopazo - EscribiendoCine

¿El amor es más fuerte?

Al estar involucrado en un típico triángulo amoroso, en el que se enfrentan el amor y el dinero, el actor Russell Brand divierte al público al interpretar a un joven adinerado en Arturo, millonario irresistible (Arthur, 2011), película con una resolución un tanto predecible, que pasó su estreno comercial al mercado del directo al DVD.

Arturo Bach (Russell Brand) es un hombre sin metas ni objetivos en su vida, la cual es conducida por dos factores: su niñera, Hobsen (Helen Mirren), y la enorme fortuna que posee su familia. Pero las extravagancias y fiestas en las cuales derrochaba su riqueza, parecen llegar a su fin cuando su madre condiciona su acceso al dinero con la aceptación de un matrimonio arreglado con Susan, una poderosa empresaria (Jennifer Garner). Pero Arthur comienza a renegar de aquella cláusula, el día que conoce a Naomi (Greta Gerwig) y se enamora de ella.

Este film es la remake de la película que, bajo el mismo nombre, estrenó el director Steve Gordon en la década del 80. En esa oportunidad, el personaje estuvo encarnado por Dudley Moore y su particular risa, que también dividía su vida entre las mujeres y el alcohol.

Un punto clave en la historia lo ocupa la nana, Hobsen, que cumple un poco el lugar de madre y consejera, en una relación que sobrepasa los límites de lo esperable. Incluso se llega a percibir una súper dependencia por parte del más joven de los Bach, lo que permite el desarrollo de situaciones ridículas, como cuando recibe el desayuno en la cama incluso cuando aún comparte las sábanas con su amante de turno, escena que también se ve en el film más antiguo pero con un mayordomo, también de nombre Hobson, interpretado en aquella oportunidad por John Gielgud.

El director de productos como Modern Family y Samantha Who?, Jason Winer, se encargó una vez más de hacer reír a los espectadores, tarea en la que también tuvo su cuota de responsabilidad el simpático Russell Brand, a pesar de protagonizar un cliché de la pantalla grande: el enfrentamiento amor vs. dinero.