Teen angels: El adiós 3D

Crítica de Natalia Trzenko - La Nación

El documental en 3D dedicado a un fenómeno del pop ya dejó de ser una rareza en las carteleras del mundo. De los Jonas Brothers al nuevo grupo de muchachos británicos de atractivo global, One Direction, hoy parece que para ser una estrella pop juvenil como el mercado y las fanáticas mandan hay que tener un documental que muestre lo que hacen en el escenario y más allá de él. En ese contexto aparece Teen Angels: el adiós 3D , una recopilación del show despedida de la exitosa banda integrada por Nico Riera, Peter Lanzani, Lali Espósito, Rochi Igarzábal y Gastón Dalmau en el teatro Gran Rex. Y, al igual que muchos de los films de este mismo subgénero, la película que resulta está realizada solamente para convocar a los fanáticos del grupo que quieran revivir el show que probablemente vieron en vivo. El agregado de los testimonios de los integrantes de la banda refuerza esa idea de audiencia informada, esa que conoce quién es cada uno y hasta qué irá a decir. Sentados frente a la cámara en el imponente Gran Rex vacío -que impacta especialmente cuando se corta a las escenas del mismo lugar estallando de fanáticos-, los artistas resumen su experiencia en la banda en segmentos divididos por temas bastante convencionales: los fanáticos, las canciones preferidas, los recuerdos, las palabras de la despedida.

Si el objetivo de la producción era realizar un registro del final de una banda y un fenómeno que encantó a miles de adolescentes y niños durante sus más de seis años de existencia, Teen Angels: el adiós 3D cumple la tarea. Pero no consigue mucho más. Como probó el documental dedicado a la llegada de Justin Bieber al Madison Square Garden, Justin Bieber: Never S ay Never, en el cruce entre la industria discográfica, los ídolos juveniles y el cine se pueden contar historias que satisfagan a los fanáticos, pero que además cuenten una historia para los que no lo son. Y tal vez nunca lo sean, pero al menos podrán entender qué es lo que fascinó a tantos y de paso ver un film que supere la inmediatez y particularidad de su premisa inicial. Algo que este documental no parece haberse planteado siquiera como posibilidad.