Teatro de guerra

Crítica de Manuel Germano - Ociopatas

La nueva película de Lola Arias, directora también de “Campo Minado”, que se presenta en el Teatro San Martín a partir de este sábado, narra el encuentro de seis veteranos de la Guerra de Malvinas/Falklands para hacer una película. Así, tres ingleses y tres argentinos, se reúnen para reconstruir sus recuerdos sobre el conflicto.

Como retazos de la memoria, los veteranos / actores charlarán, discutirán y recordarán aquellas experiencias vividas durante el conflicto: las posiciones que ocupaban, los camaradas fallecidos, las estrategias pensadas, pero sobre todo, la disposición a dar la propia vida para salvar a la patria.

La película, que atraviesa momentos emotivos y profundos, también le permite al espectador algunas escenas divertidas y relajadas que complementan este experimento “ficción – realidad”. En cuanto al contenido, la discusión sobre la soberanía de las islas se enuncia en la historia, y resulta conmovedor ver como mas allá de las diferencias culturales de los diferentes “personajes”, todos coinciden en la fuerza de la juventud y los sentimientos que se encontraban atravesados durante la guerra: el miedo a no volver, pero también la determinación de cumplir con una misión. Jóvenes algunos, jefes otros, 35 años después coinciden, en este trabajo de Lola Arias, en un mismo lugar y hablando de los mismos temas.

Es muy valioso el trabajo de entrega y compromiso de Lou Armour, David Jackson, Rubén Otero, Sukrim Rai, Gabriel Sagastume, Marcelo Vallejo, quienes mas allá de interpretar un papel, ahondan en su recuerdo para transmitir así, sincera emoción.

Durante el desarrollo de la película, los protagonistas conocerán a niños en una escuela, y a jóvenes actores dispuestos a representarlos a ellos mismos 35 años antes, basándose en sus personalidades y en el relato que cada uno de ellos relata. Un guiño sobre como a pesar del tiempo transcurrido, y de como las generaciones fueron cambiando, el tema “Malvinas” continúa siendo de interés para niños y adolescentes.

Con elementos técnicos de gran calidad, y un montaje que hace recordar a la obra de teatro Campo minado, esta película es ejecutada de forma inteligente y con mucha originalidad, pues en ningún momento “Teatro de Guerra” en la monotonía o lo predecible.

Una opción cinefila para disfrutar y reflexionar.