Ron da error

Crítica de Santiago García - Leer Cine

Una empresa ha creado un nuevo dispositivo que es furor: un amigo robot, como un huevo del tamaño de una mascota, que sabe todo sobre su dueño niño adolescente. Una computadora que simula ser tu mejor amigo y reúne todo tu información y te conecta con el mundo. Todos tienen uno y están obsesionados con él, excepto Barney, un solitario muchacho que vive con su padre y su abuela. Al no tener su robot, queda aislado del resto el día de su cumpleaños. Su padre no llega a comprarle uno en la casa que los vende, por lo que termina adquiriendo uno fallado que se ha caído del camión que los transporta. El niño solitario y el robot aislado tendrán mil problemas, pero obviamente son el equipo perfecto que lo cambiará todo.

Esta película no es de Pixar, pero fue realizada con un grupo de personas que parece haber estado espiando a Pixar desesperadamente. Cae en el lugar común de la tendencia anti-tecnología y obviamente la empresa fuera de control es, como siempre, una copia de Apple. No importa tanto, porque un golpe de timón a tiempo sirve para decir que todos tienen un poco de razón, que un poco de aquí y un poco de allá, en un sano equilibrio, servirá para que todos seamos felices. Visualmente aceptable, cae en el mismo problema que varios títulos de Pixar, el arranque es más poderoso que el final excesivo, lanzado a una aventura demasiado grandota como para ser emocionante. Mucha rutina, pero seguramente algún niño la disfrutará, porque el estudio de mercado con el cual la escribieron así lo indica.