Rio

Crítica de Pablo O. Scholz - Clarín

El último guacamayo virgen

La nueva película del creador de “La Era de hielo” Tiene a un ave como protagonista en las calles brasileñas.

Con la desfachatez que tenían (y mantienen) ciertos personajes de La Era de hielo , Blu deambula por las callecitas cariocas, las playas de la Cidade maravilhosa y también las favelas en Rio , nueva producción de los hacedores de aquel filme.

Blu tiene una condición que lo emparenta con aquéllos -¡habla!, y no sólo porque es un guacamayo- y otra que casi, casi: si los protagonistas de La Era...

se extinguieron, eso es algo que la especie de Blu corre peligro. Es el último guacamayo, macho, y vive domesticado desde que literalmente cayó con su embalaje (había sido apresado por cazadores furtivos en la selva brasileña) a los pies de Linda, una estadounidense que lo toma como mascota.

Blu no sólo no sabe volar (lo cual no es sólo temor, sino que, a la hora de buscar comparaciones, lo acerca al pececito payaso Buscando a Nemo , que tenía una aleta cortada como si se tratara de una discapacidad) sino que también es el último guacamayo azul virgen. Y en Río de Janeiro han localizado a un aguacamaya azul en su misma condición, y bueno, para que no se extinga la especie, hay que llevarlo de regreso a Brasil.

De tono ecologista pero sin que el mensaje sea refregado en las caritas de los espectadores, Rio tiene más el clima de la primera Era de hielo que de sus secuelas. Se trate de la frescura de los personajes, de la originalidad del relato, comparte con la opera prima del mismo director, Carlos Saldanha, un tono de humor zumbón, y un personaje central -Blu- que como Sid es terriblemente entrador y querible.

La animación, sea de Pixar, de DreamWorks, Sony Pictures Animation o del estudio de Saldanha, aún no ha logrado con los humanos lo que sí con los animales. Y entonces Linda se parece demasiado a la protagonista femenina de Lluvia de hamburguesas y tiene algo de la Roxanne de Megamente . Pero como lo que aquí importa son los animales (más aves, monos, un bulldog que se babea), que son quienes atraen más a los pequeños, éstos importan más y -extraño-, hace que los niños sientan más simpatía por ellos que por los hombres y mujeres.

Divertida siempre, alocada de a ratos, Rio no decae en su ritmo e incluye un clásico de fútbol entre Argentina vs Brasil de resultado... incierto.