Pibe chorro

Crítica de Rolando Gallego - Lúdico y memorioso

Rompiendo Mitos

No es un dato menor que “Pibe Chorro” (Argentina, 2015) esté dirigido por Andrea Testa, quien en su debut en el largometraje de ficción co dirigiendo “La larga noche de Francisco Sanctis” ha podido construir una idea sobre la otredad novedosa.

El documental “Pibe Chorro” busca desestigmatizar y romper con una idea relacionada al grupo etario, que mal ha sido tildado por los medios de comunicación y la sociedad, como “pibes chorros”.

Dentro de ese grupo se ha ubicado a un segmento de la sociedad que, sin oportunidades, ha intentado buscar un rumbo pese a que las puertas se les han cerrado.

Testa bucea en el mundo detrás de los noticieros sensacionalistas, rastrea opiniones en la calle (hallazgo ocultar el rostro de los exponentes), habla directamente con los familiares y evita la victimización y exposición casuística para construir con lucidez un documental que utiliza una multiplicidad de materiales (trazos gráficos, dibujos, animación, resemantización de archivos, etc.) para consolidar y potencias su propuesta.

“El proyecto de vida se construye más allá de la cárcel” dice una de las entrevistadas, idea con la que “Pibe Chorro” trabaja todo el tiempo para afirmar la posibilidad de una relación con el otro armónica y contenida.