Obsesión

Crítica de Leonardo M. D’Espósito - Revista Noticias

Se trata de un esquema bastante frecuente en el noir tradicional, al que no le falta la duplicidad emotiva de la mujer manipuladora ni el aire de perdedor digno del victimario-víctima.

Un tipo con una vida tranquila y un pasado recibe un pedido desesperado de ayuda: la ex necesita que le saque de encima –a ella y al hijo de ambos– al psicópata que tiene como nueva pareja. Y el tipo, porque si no, qué película habría, se deja convencer y todo se complica después.

Es decir, se trata de un esquema bastante frecuente en el noir tradicional, al que no le falta la duplicidad emotiva de la mujer manipuladora ni el aire de perdedor digno del victimario-víctima.

Desde “Pacto de sangre” (obra mestra de Billy Wilder) sabemos que estas cosas llevan irremediablemente a la tragedia. En este caso, todo funciona pero sólo a medias: aunque el lugar común parece utilizarse “a propósito”, la mecánica completa del asunto nos deja indiferentes, y en última instancia el interés que pueden despertarnos los personajes –bien llevados por todos los actores, por lo demás– se disuelve en la necesidad de saber si “eso que adivinamos” que va a pasar, pasa. Spoiler: sí, pasa, más o menos como lo pensamos.