Observando al observador

Crítica de Rodrigo Chavero - El Espectador Avezado

Las relaciones entre Estados Unidos y Argentina atravesaron diferentes estadíos. Belicosos, enfrentados, "carnales", cooperativos y entreguistas, "de brazos y piernas abiertas", como dice en la apertura de su documental, Malena Juanatey. En este trabajo, "Observando al observador", la cineasta ensaya explicaciones sobre los intereses americanos en nuestro país, durante la época de la última dictadura militar y también presenta el esquema de relación en los años del Menemismo.
Leímos que Juanatey, accidentalmente, mientras bebía con un estadounidense, hace unos años, pudo percibir el gran (enorme) desconocimiento que tenían sus ciudadanos de los vínculos que sus gobiernos de la época tenían con los gobiernos militares latinoamericanos.
Fue entonces que pensó en cómo dar cuenta de eso, desde la voz misma de nativos que hayan atravesado por la experiencia y puedan poner voz para explicar que sucedía entre ámbos países a nivel diplomacia y plan de acción. Patricia Erb y Olga Talamante fueron las elegidas, mujeres americanas que estuvieron detenidas durante la década del ´70 en nuestro país. Sus testimonios, registrados por la directora, nos brindan detalles fuertes, discrecionales, sobre la naturaleza de los eventos que se jugaban en esos tiempos.
Haciendo un gran trabajo de archivo, Juanatey detalla algunos hechos escalofriantes, en simples palabras (por ejemplo, el accionar de la OEA a la hora de proteger los derechos humanos en la región, que hizo incluso un preaviso de su visita para que el gobierno argentino ajustara sus cabos sueltos a cambio de beneficios económicos para EEUU). Aporta testimonios interesantes y muestra dominio del tema.
El gran valor de "Observando al observador" es el hecho de ver cómo a pesar de la juventud del equipo técnico, las ganas de investigar y dar con la verdad van construyendo un manifiesto político de forma: a las cosas es bueno llamarlas por su nombre y aunque haya documentos que no se desclasifquen para el público, podemos ponerle palabras y rostros a hechos graves que costaron muchas víctimas en nuestro país y en América Latina.
En definitiva, "Observando al observador" es un documental muy didáctico, sobre todo si no conocés sobre la "Operación Cóndor" y las implicancias políticas y estratégicas de aquel salvaje y maquiavélico plan.
Pero no todo queda en los 70 y los 80 porque promediando su duración, el film se instala, en las relaciones del gobierno de Carlos Menem con el gran país del Norte. Sin palabras. Tremenda etapa. Un par de pinceladas basta para mostrar el rol de nuestros funcionarios en esa época...
Dice Juanatey,"queda claro que con los juicios, no se cierra la historia" y es cierto. Al recuerdo hay que activarlo para tenerlo vivo en la memoria de la gente. Eso, es lo que hacen documentales como este. Impiden el olvido y señalan responsables.
Fuerte y necesario para las nuevas generaciones, todo camino de acceso a la verdad debe ser compartido.