Nacido para morir

Crítica de Rodrigo Chavero - El Espectador Avezado

Hace un tiempo participé de una charla donde Andres Borghi mostraba lo que hacía, a poco de haber ganado un renombrado concurso de cortos donde el jurado principal fue Peter Jackson... ¿recuerdan?
Luego de una preselección durísima, Borghi quedó con los finalistas y todos ellos rodaron sus ideas en Nueva Zelanda, siendo al final, "Working day", su trabajo, el mejor de todos. En su encuentro con el público aquella vez, presentí que su capacidad de ir más allá en la industria independiente, era su condición de fuste. Lo cierto es que el hombre tiene muchas ideas originales y un gran desparpajo para filmar y finalmente, luego del paso de su ópera prima por varios festivales (en el BARS 2014 fue un hitazo), llega a salas comerciales, su primer largo: "Nacido para morir".
Antes que nada, tienen que pensar en una cinta de acción, con humor y atmósfera local. Medios modestos para la realización pero una gran vocación por mostrar lo que se puede cuando hay actitud, Borghi nos trae la historia de un agente especial, Marcelo Riesgo, que enfrentará el secuestro del doctor Pupete (sic), importante experto en salas picantes (?) que ha sido secuestrado por "Cara de Póker", un villano del que mejor, no anticipar mucho.
La cuestión es que este Poker Face es un malo bastante básico y más que miedo, inspira cierta retorcida ternura en cada uno de sus actos sombríos. Es importante destacar algo de esta cuestión no es poco, Pupete ha logrado desarrollar una fórmula que podría reemplazar los distintos tipos de combustibles, por lo que hay un ribete estratégico serio, de fondo. O no. No se. Ponele.
(Trato de ponerme serio hablando de "Nacido para morir" pero me cuesta)
La trama es esquemática pero divertida. Hay artes marciales, disparos, persecusiones y gente que entiende que se puede enfocar el cine de género, de manera descontracturada. Borghi homenajea al cine de agentes especiales clásicos y llena de lugares comunes la historia. Plantea gag por gag y genera cierto campo físico donde la risa aparece seguido, merced a la multiplicidad de situaciones de golpes, amagues y derrapes varios
No importa mucho que no creamos que sucede. Esto es cine independiente bien hecho, con cierto estilo y dedicación. Con ingenio para suplir aquello que no se puede hacer de forma espectacular, por temas de costo (las explosiones, sin ir más lejos).
"Nacido para morir" en definitiva, es un film de género hecho por un director que sabe de cine en serio. Y resuelve con lo que tiene, para contar una historia, delirante y loca, de principio a fin.
Es posible (y siempre debemos tenerlo en cuenta) que si tu paladar no está acostumbrado a este tipo de elecciones, te cueste valorar esta peli en tu justa dimensión. Pero suma. Anotala y acercate al Obelisco que puede verse esta semana en BAMA cine. De nada.