Luces rojas

Crítica de Emiliano Fernández - A Sala Llena

El proceso de convalidación

Definitivamente los thrillers sobrenaturales han sido bastante maltratados a lo largo de los últimos lustros y hoy el mero intento de reincidir en semejante manojo de clichés puede resultar sospechoso, contraproducente y/ o destinado al fracaso. A esta altura del partido podemos afirmar que a Rodrigo Cortés le fascinan los géneros cinematográficos “difíciles” que necesitan de una progresión narrativa dinámica y una mínima originalidad para captar la atención del espectador promedio contemporáneo, un espécimen que a su vez gusta de vanagloriarse de conocer todos los truquillos del rubro en cuestión. Al igual que la comedia negra Concursante (2007) y aquella obra maestra del suspenso minimalista intitulada Enterrado (Buried, 2010), Luces Rojas (Red Lights, 2012) entrega eficacia e inteligencia...