IT: Capítulo 2

Crítica de Denise Pieniazek - Puesta en escena

It: Capítulo II
Llega la secuela de It, titulada It: Capítulo dos perteneciente a la nueva versión cinematográfica de la novela de Stephen King. La película es nuevamente producida y dirigida por los hermanos argentinos Bárbara y Andy Muschietti, y es muy esperada por sus admiradores, sobre todo adolescentes, a nivel internacional
Por Denise Pieniazek
“En Derry, olvidar la tragedia y el desastre era casi un arte…”
Stephen King (1986).

Recordemos que la primera parte It (2017) se estrenó veintisiete años después que la miniserie televisiva It: El payaso asesino (It ,1990), porque como es sabido “It” o en una de sus formas visibles el payaso “Pennywise” regresa a la ciudad de Derry cada veintisiete años. La secuela en cuestión, titulada It: Capitulo Dos (It Chapter Two, 2019) está situada cronológicamente, por esa misma razón en 2016 en donde todos los niños que conocimos en la primera entrega ambientada en 1989 ya son adultos.

Después de un prólogo que vuelve a ahondar en la temática de la xenofobia, la homofobia y el bullying, Mike que es el único que continúa viviendo en Derry es el encargado de avisarle al resto de sus amigos que han partido que Pennywise está de regreso asesinando gente. No es casual que sea Mike quien vuelva a reunir al “Club de los perdedores”, pues por no haber dejado la ciudad sus recuerdos están más frescos que los del resto y narrativamente hablando, es quien en la niñez fue el último en sumarse al grupo amistoso e inversamente ahora es quien los convoca para cumplir la promesa con la que había finalizado It (2017).

Uno de los aspectos más interesantes en esta historia sigue estando aquí presente, y es que hay algo putrefacto en Derry ya desde su fundación, “eso” que parece salir de las alcantarillas extendiéndose por toda la ciudad, hasta contaminarla. Aquello que después del enfrentamiento inicial con el “Club de los perdedores” volverá más fortalecido y aterrador que nunca. Y cabe preguntarse si “eso” ha arruinado a la ciudad o si pasa allí porque Derry es un lugar donde desde sus cimientos los adultos son violentos, posesivos o “padres ausentes”, y por ende los niños están totalmente desprotegidos y desprovistos de valores.

Al reencontrarse los protagonistas: Mike (Isaiah Mustafa), Beverly (Jessica Chastain), Bill (James McAvoy), Richie (Bill Hader), Eddie (James Ransone), Ben (Jay Ryan) y Stanley (Andy Bean), veremos que ha sido de la vida de cada uno de ellos. Además, en relación a lo mencionado anteriormente, los traumas que estos niños han padecido muestra sus secuelas emocionales en la adultez. Por ejemplo, el personaje de Eddie está casado con una mujer con actitudes sobreprotectoras muy similares a las de su madre, y Beverly está en pareja con un hombre que ejerce la violencia de género igual que lo hacia su padre. En consecuencia, lo cíclico está presente en todo momento, no sólo desde el regreso cada veintisiete años de Pennywise, sino también en la repetición de conductas y patrones dañinos, así como también desde la composición visual a través de las aberturas circulares.

Es por ello que al regresar a Derry, el relato propone gran parte del tiempo que cada uno de los personajes realice su búsqueda individual para reencontrarse a sí mismos. A través de dicha experiencia, deberán enfrentar los miedos del pasado para poder confrontar nuevamente todos juntos al gran monstruo y sus constantes metamorfosis.

A partir de allí habrá una alternancia entre el presente y el pasado de cada uno de ellos a través del recurso del flashback. Algunas escenas de la infancia pertenecen a escenas de la primera entrega y otras de la niñez se conocen por primera vez en esta segunda parte.

La película puede dividirse estructuralmente en tres actos, un primer acto con un prólogo y el reencuentro y presentación actual de los protagonistas. Un segundo acto en el cual cada uno debe individualmente recordar su pasado y con ello sus traumas. Por último, un tercer acto coral en el que los protagonistas se unen para enfrentar a Pennywise y que por supuesto representa el desenlace del relato.

Al respecto puede decirse que el primer acto y parte del segundo resultan entretenidos, intrigantes y atrapantes, pero que lo siguiente es algo repetitivo y el crescendo de su desenlace resulta muy exagerado y por ende el relato pierde potencia, y en consecuencia verosimilitud. En adición, a pesar de que el director Andy Muschietti es muy cuidadoso con el uso del CGI (Computer-generated imagery) es notorio que en el desenlace éstos efectos digitales son algo excesivos o quizás el desencadenamiento de metamorfosis de la morfología del monstruo no está tan bien logrado y por eso causa esa impresión.

Quizás el director haya decido proponer esta estética porque en palabras suyas (durante la conferencia de prensa del pasado 21 de agosto) ha querido lograr un “terror surrealista”, no es casual que aparezca sutilmente en un letrero A Nightmare on Elm Steet (1984). En contraposición al tono de la primera película para la cual su director mencionó en la conferencia de prensa del 2017 que había sido influenciado por Stand by me(1986). Este cambio de clima hacia un aumento de la violencia, lo sangriento y lo aterrador se debe a que ahora se trata de los adultos y sus roturas.

A pesar de los problemas del final, lo cual es algo frecuente en el cine actual y de menos lograda que su predecesora It: Capitulo Dos posee varios momentos estimulantes a través de su terror que hasta producen el llamado “salto en la butaca”. Asimismo, hay que recalcar el acierto del director y del nuevamente guionista Gary Dauberman en dicha transposición manteniendo la esencia del texto literario, pues pasar de un lenguaje a otro nunca es sencillo. Además, que se celebra conIt: Capitulo Dos una propuesta seria del género del terror dentro de la producción actual, con varios cameos sorpresa a varios artistas para los cinéfilos.