El planeta de los simios: La guerra

Crítica de Fredy Friedlander - Leedor.com

No decae el nivel del tercer capítulo de la nueva serie

Han pasado casi 50 años desde la lejana y primera versión de la obra de Pierre Boulle, donde Charlton Heston lideraba a un grupo de astronautas perdidos en el, tantas veces visitado en el cine, planeta de simios.

“El planeta de los simios: la guerra” es la tercera de una nueva serie que logra mantener el buen nivel de las dos anteriores. Nuevamente, al igual que en la inmediatamente precedente, la dirige Matt Reeves (“Cloverfield – Monstruo”) y también es el chimpancé César, el líder de los simios. Quien lo interpreta es Andy Serkis, un especialista en este tipo de personajes, el Gollum de “El señor de los anillos”, realizando un trabajo notable ayudado por la técnica de captura de movimiento.

El inicio es pura acción con un grupo de soldados que llevan en sus cascos inscripciones agresivas como “Monkey Killer”, enfrentándose con uno de los grupos de simios. Ver a estos montados en caballos y con rifles y otras armas le da por momentos a la película un aire de western. Pero en verdad es más una película “de guerra” y más de un espectador no podrá evitar el paralelo con “Apocalypse Now”. Ello inclusive en la figura del coronel que interpreta aquí Woody Harrelson y que remite al famoso Kurtz protagonizado por Marlon Brando.

La película tiene una duración excesiva de casi dos horas y media y gran parte de la segunda mitad transcurre en una especie de campo de concentración donde flamea la bandera norteamericana e incluso se llega a escuchar insólitamente el himno nacional de los Estados Unidos. Los soldados recuerdan por la forma en que se expresan al unísono y marchando a los nazis, mientras que el coronel muestra una extrema crueldad con el trato de los simios en prisión.

Hay, sin embargo, momentos de alivio de la tensión como los que protagoniza una niña muda con el orangután Maurice o también con el gorila Luca y una flor rosada. A estos personajes se agrega un mono “atípico”, que se hace llamar “Bad Ape”, y que no tiene un ápice de maldad. Casi se podría decir que es el equivalente a los personajes de “animation relief” y que en su presencia se producen las situaciones más cómicas, entre tanta violencia.

Este cronista considera al tercer capítulo un espectáculo recomendable, aunque considera al primero: “El planeta de los simios: r(evolución)”, dirigido por Ruper Wyatt, como el mejor de la nueva serie.