El conjuro

Crítica de Fredy Friedlander - Leedor.com

La película que desplazó a “Metegol” del tope de las recaudaciones

Existía alguna curiosidad en ver “El conjuro” (“The Conjuring”), la película que desplazó a “Metegol” al cabo de tres semanas consecutivas al tope de las recaudaciones.
Dirigida por el malayo James Wan, el realizador de la primera de la serie “El juego del miedo”, estaría basada en hechos reales, algo que a esta altura ya se ha convertido en un cliché bastante gastado del cine norteamericano.
Es poco lo que aporta de original este relato bastante convencional centrado en una familia numerosa (cinco hijas) que se muda a una casa que podríamos decir está embrujada. Desde el principio una extraña voz de mujer susurra reiteradamente un “Miss Me?” (Me extrañas?), que pronto adquirirá significación. El matrimonio de Carolyn (Lili Taylor) y Roger (Ron Livingston) Perron finalmente convencerá a una pareja de demonólogos para contar con sus servicios de exorcismo. Se trata de Lorraine (Vera Farmiga) y Ed (Patrick Wilson) Warren, que se hicieron populares en las décadas del ’60 y ’70.
Dado que la historia transcurre en Rhode Island en 1971 los elementos usados pueden parecer actualmente anacrónicos al no existir aún los celulares ni Internet. En cambio utilizan grabadores a cinta, lámparas con luz ultravioleta, termostatos y otros utensilios hoy probablemente obsoletos.
Hay también una parafernalia de ruidos, chirridos, puertas que se cierran de golpe, pisos que ceden y arrastran a más de un cuerpo a sótanos donde los esperan sorpresas varias. Hay elementos ya usados en otras producciones similares como sillas mecedoras, pájaros en cantidad (¿Hitchcock?), muñecas que parecen cobrar realidad y sobre todo un aire de “déjà vu” que seguramente no molestará a los adictos al género. No faltará incluso un cura, quien requerirá la autorización del Vaticano (!), para hacer un exorcismo al no estar bautizadas las hijas del matrimonio Perron.
Y el final será feliz, como imagina el lector, salvo un pequeño detalle relacionado con una cajita de música que anuncia claramente que pronto tendremos “El conjuro 2”, seguramente en manos de otro realizador ya que James Wan ya se estaría preparando para dirigir “Rápidos y furiosos 7”.