¿Dónde estás Bernadette?

Crítica de Martín Chiavarino - Metacultura

El mundo como voluntad de creación

Richard Linklater tiene un estilo muy personal e inconfundible, marcado por la calidez de sus relatos y una aproximación a los problemas sociales desde un sentido del humor irónico que le permite abordar la profundidad de estas situaciones sin caer en la circunspección, pero tampoco sin menoscabar u ocultar que esta gravedad subyace y necesita salir a la luz para encontrar una solución.

La historia del nuevo film del realizador de Boyhood (2014) se centra en una creadora que deja de concebir, indicio sobre el rol de los artistas en general en la sociedad y su condición de agentes de las transformaciones del sentido común y la introducción de la novedad. Recluida en su hogar de Seattle, Bernadette Fox (Cate Blanchett) es una famosa arquitecta de Los Ángeles que vive alejada de su profesión desde hace casi veinte años. De promesa vanguardista de la arquitectura ecológica y sustentable, la mujer hoy se ha convertido en una persona cínica, irónica, ligeramente agorafóbica y antisocial, muy apegada a su brillante hija adolescente. Su marido, Elgie (Billy Crudrup), es un diseñador de programas de tecnología de Microsoft que vive para su trabajo y ha comenzado a ver con preocupación la actitud beligerante de Bernadette para con sus vecinos. El film narra el momento más álgido de la crisis matrimonial cuando la hija quinceañera de la pareja, Bee (Emma Nelson), convence a sus padres de embarcarse en un viaje familiar al continente antártico. Bernadette comienza a hacer planes para evitar el viaje mientras que Elgie pide ayuda a una especialista para que trate los trastornos de su esposa, que a su vez ha iniciado una guerra con su vecina, Audrey (Kristen Wiig).

¿Dónde Estás, Bernadette? (Where’d You Go, Bernadette?, 2019) es la adaptación de la aclamada novela homónima de la escritora y guionista norteamericana Maria Semple publicada en 2012, que aún no tiene traducción al español. La película difiere de la novela principalmente en el eje de la narración y en la construcción del relato. Mientras que el libro está estructurado a partir de documentos y la narradora es Bee, en el guión de Holly Gent y Vincent Palmo, en el que también participó Richard Linklater, el personaje de Bernadette lleva la voz cantante del relato por delante de la de su hija y reemplaza los documentos por las acciones inesperadas de la desencantada arquitecta. Linklater mantiene la tensión de la novela entre la adrenalina que provee la creación artística y el estado general de decadencia de los artistas que abandonan su motivación. La relación entre la creatividad y las obstrucciones, tema ríspido del proceso artístico, que siempre se debate entre la libertad y las constricciones, también es uno de los ejes centrales de una narración en la que el humor y la emotividad van de la mano.

Acompañada por un gran elenco secundario que incluye a Laurence Fishburne, Kristen Wiig, Judy Greer, Billy Crudrup, Troian Bellisario, Zoe Chao y Emma Nelson, Cate Blanchett entrega nuevamente una gran actuación para un personaje con el que se mimetiza completamente. La música melancólica de Graham Reynolds, colaborador incansable de la cinematografía de Linklater, se centra en los estados de ánimo, las emociones y su relación con los espacios que los personajes habitan, al igual que la fotografía de Shane Kelly, otra clave central del estilo del director de Fast Food Nation (2006) y A Scanner Darkly (2006).

Al igual que en Boyhood (2014) y Last Flag Flying (2017), el film demuestra una vez más el interés de Linklater por las etapas de la vida, la superación de los problemas, los síntomas de la decadencia personal y los procesos de recuperación de la vitalidad a partir de la sanación de las heridas, el cambio de mirada de la vida y el reencuentro con la pasión, tres momentos del proceso que transita la protagonista. Linklater logra nuevamente crear una obra en la que el drama y la comedia encastran perfectamente y en su punto justo, especialmente en la maravillosa interpretación de Blanchett.

¿Dónde Estás, Bernadette? también trabaja muy bien la relación entre la arquitectura y el diseño con la ecología y la sustentabilidad, temática en la que Bernadette Fox es una especialista ya que su obsesión es construir con materiales cercanos respecto de la obra. Los caprichos de los millonarios, la relación entre forma y función en la arquitectura, las contradicciones de las reglas sociales y la necesidad de aventura que anida en el corazón humano son algunas de las temáticas que Linklater trabaja en una película donde la nostalgia de las canciones pop, el humor que enternece y el arte como motor de la creación tienen un lugar preponderante en la construcción de las historias de la vida.