Día de los enamorados

Crítica de Diego Batlle - Otros Cines

Las fórmulas del amor

Vi esta mañana en el Hoyts de Abasto esta muy discreta comedia romántica que se estrena en los próximos días en todo el mundo. Llego a mi casa y leo en una de las tantas noticias provenientes de Hollywood que "la secuela ya está en marcha", pero esta vez las historias no transcurrirán durante el Día de San Valentín sino en vísperas de Año Nuevo, siempre con Garry "Mujer Bonita" Marshall como director, Katherine Fugate como guionista y unas cuantas de las estrellas que aparecen en Día de los enamorados.

Este nuevo film del director de Frankie y Johnny es un típico producto de "concepto" sustentado en fórmulas recontra aplicadas: contratamos una veintena de figuras (cada uno trabaja una semanita por un buen dinero), escribimos un puñado de historias románticas que transcurran en Los Angeles durante el Día de San Valentín y las unimos con el manual del guionista primerizo que acaba de aprobar la materia "Estructura coral".

Durante la primera hora, Día de los enamorados se sostiene con algunos pasajes, situaciones, diálogos y personajes medianamente inspirados, pero durante la segunda mitad la cosa se hace muy cuesta arriba y todo se "resuelve" como sea, a los ponchazos y, para colmo, con toda la carga demagógica y tranquilizadora de la que es capaz una producción conservadora de Hollywood.

El casting combina todo tipo de intérpretes y la mezcla de edades y estilos de actuación no siempre es fructífera. Gracias al profesionalismo, nadie mete la pata, pero tampoco se luce demasiado.

Esta suerte de zapping fílmico nos deja, al menos, la ilusión de ver mucha gente linda (y rica y famosa) jugando los juegos del amor. Pero las figuritas pasan y uno jamás se puede comprometer o identificar con ellas. Es algo así como presenciar una alfombra roja previa a los Oscar. De cine puro y genuino, lamentablemente, esta vez hay muy poco.