Deshora

Crítica de Diego Batlle - Otros Cines

Deseo y decepción

Esta ópera prima dirigida por una mujer -una saludable tendencia a la que por suerte nos tiene acostumbrado el (ya no tan) Nuevo Cine Argentino- se estrena luego de un paso por importantes festivales (Berlín, BAFICI, Cartagena, etc.).

Bárbara Sarasola-Day describe cómo el arribo de Joaquín (Alejandro Buitrago), un joven colombiano que trata de combatir su dependencia a las drogas duras, a la casa de su prima Elena (María Ucedo) cambia por completo la existencia de ella y de su marido Ernesto (Luís Ziembrowski), quienes conforman un matrimonio de larga data que lucha contra el desgaste de toda pareja, la dificultad de explotar una hacienda tabacalera en Salta y la frustración de no haber podido tener hijos.

El recién llegado -con su desenfado y su libertad sexual- conmueve a ambos protagonistas, generando tensiones, pero también tentaciones varias. Con algo de déja-vu (la referencia al cine, también salteño, de Lucrecia Martel es inevitable), Deshora -narrada con precisión, sutileza y elegancia- resulta una más que interesante propuesta, realzada desde lo visual por un aprovechamiento de las locaciones naturales y por el aporte en ese sentido del talentoso director de fotografía Lucio Bonelli.