Caminando con dinosaurios

Crítica de Ezequiel Obregon - EscribiendoCine

Una caminata salida de Billiken

Caminando con Dinosaurios (Walking with Dinosaurs, Barry Cook y Neil Nightingale, 2013) es una propuesta en la que impera el didactismo y no llega a generar una curva dramática atractiva.

Si debiéramos considerar a Caminando con dinosaurios a partir de una mirada sincrónica, no podríamos dejar de señalar su anodino desarrollo técnico. Lo que no significa que el fuerte esté puesto en el guion, ni que visualmente “cumpla” y nada más; ni la historia es interesante (aun reconociendo que apunta a un público muy pequeño, y en consecuencia debe aspirar a lo sencillo, que no tiene por qué ser malo), ni puede justificarse el poco elaborado diseño de imagen.

La película es un relato enmarcado, que comienza cuando un tío paleontólogo lleva a sus dos sobrinos a un campo en el que hay fósiles. Un pájaro se presenta ante el muchachito y le cuenta la trama “detrás del diente fósil” que tiene el tío. Lo que sigue es una historia de superación, una suerte de Pie pequeño en busca del Valle Encantando (The Land Before Time, Don Bluth, 1988) que sigue el derrotero de Patch, pequeño dinosaurio vegetariano (como siempre, los depredadores son malísimos) al que le matan al padre y debe aprender a crecer a los ponchazos mientras se enamora de una hembrita compañera de viaje.

Al ya apuntado escaso atractivo visual, se le suma la torpeza de poner algunos carteles que dan cuenta de mínimas explicaciones sobre las especies que aparecen el film y la decisión (extraña, en el universo que la película propone) de que los animales hablen, ¡pero no muevan la boca! Lo que ubica a estos dinos en el terreno de la telepatía...

Caminando con Dinosaurios remite directamente al imaginario del espectador de más de diez años, como mínimo, quien ya experimentó la destreza narrativa de Steven Spielberg en la saga de Jurassic Park. Para él, este producto ofrece más oportunismo y didactismo demodé que ideas. Para los más pequeños, puede ser que el resultado sea más auspicioso, siempre y cuando no pasen por la sala de al lado, en donde estén proyectando Frozen, una aventura congelada (Frozen; Chris Buck, Jennifer Lee, 2013), por ejemplo.