Está basada, sin decirlo, en el caso de Domenique Strauss_Kahn, el poderoso hombre del FMI detenido en Nueva York acusado por la violación de una camarera. Pero el director es Abel Ferrara y todo comienza con fiestas de desenfreno sexual explícito, con un Gerard Depardieu inusualmente expuesto. Después, llega una refinada reflexión sobre el poder, el dinero, las manipulaciones.
El libro lo escribió Silvester Stallone y también es el productor: él sabe muy bien que el entretenimiento con peleas y persecuciones, con un buen héroe de acción como Jason Statham, garantiza el interés para un público que elige la acción.
Como en la obra de teatro y la película “El metodo grönhold”, aquí se trata de seleccionar brutalmente a un nuevo jefe. Más violencia explicita y la misma tensión y humillación.
La remake de una película australiana de l978. En el centro de la escena, un paciente en estado de coma desde hace 25 años, con poderes telepáticos, un medico desquiciado, su hija y la enfermera. El terror se instala rápidamente. Para los que amar el género.
El mismo elenco que la primera, de grandes comediantes pero esta vez el malo es un empresario que contrata sus servicios para luego llevarlos a la quiebra. Pero si bien es graciosa y tendrá a su público, solo entretiene de a ratos.
Es la quinta película de uno de los realizadores más personales de nuestro país, y esta vez, a pesar del gran despliegue de presupuesto y una estrella como Viggo Mortenssen, no renuncia a su estilo. Logra en esta búsqueda desesperada de su hija, por un militar danés en el medio de la conquista del desierto, mezclar el lirismo, lo onírico, con masacres, cadáveres, trincheras y misterio.
Un encantador documental realizado por Viviane Blumenschein, protagonizado por el Chino Laborde, el guitarrista Dipi Kvitko y el bandoneonista Pablo Greco, que viajan a Finlandia para comprobar si Kaurismaki tenía razón y en ese país lejano inventaron el tango. Humor, ternura. Hay que verlo.
Como ocurrió con otras sagas (Harry Potter, Crepúsculo), el último libro se dividió en dos. La única razón es económica. La necesidad de alargar un éxito y seguir reteniendo a un público cautivo. Por eso, esta primera parte de Sinsajo, ya no tiene el brillo de la segunda entrega, porque el reality sangriento que ofrenda a los jóvenes terminó y ahora el acento está puesto en el poder de la propaganda política, en la manipulación, y queda la enorme expectativa del gran final en la próxima película. Pero quienes siguieron con devoción la evolución del personaje de Jennifer Lawrence no se perderán esta entrega. VAYA (###)
La aparente armonía de un matrimonio se resquebraja inevitablemente por un tercero, por un secreto. Lo mejor son las actuaciones de Daniel Ateuil y Kristin Scott Thomas. El guionista y director resuelve fácil y rápido.
Un muy interesante film brasileño que establece un paralelo entre los acontecimientos históricos, la época de Tancredo Neves y la incipiente libertad, creatividad y decepciones de un grupo de adolescentes.