Zenitram

Crítica de Fernando Alvarez - Todo lo ve

Barone sobrevuela una caótica Buenos Aires

El director Luis Barone (24 hs: Algo está por explotar) incorpora la estética del comic en este film nacional ambientado en el año 2025, en el que Buenos Aires está azotada por grandes corporaciones y escasea el agua. Hace mucho tiempo que no lllueve.

En medio del caos imperante, surge la figura de Martínez (Juan Minujín en un debut prometedor como protagonista), un joven recolector de residuos que pierde su trabajo y recibe -en un baño de Constitución- un "don" que lo convierte en un superhéroe bastante especial.

El tema del "doble" (Martínez funciona a manera de un espejo que devuelve a Zenitram) que "todo" lo puede en una sociedad que fagocita a su gente; la corrupción política y las grandes corporaciones que hacen su negocio, están en la mira bien enfocada de Barone.

Zenitram muestra a un personaje central vulnerable y adicto a a cocaína para poder sobrellevar su miedo a volar (de hecho se estrella contra el Obelisco y hasta es internado en el "Miami Superhéroes Hospital" donde comparte penas con Steven Bauer). Pero tiene buen corazón y su misión consiste en devolver el agua a la gente.

La película, narrada a manera de cuento infantil con ilustraciones en el prólogo y en el desenlace, ofrece una mirada delirante, crítica y estimulante a nivel visual que incluye humor, acción, efectos y superpoderes. De este modo, resulta lograda la escena de la casilla de Retiro recortada por los grandes edificios de la urbe y la del tanque de agua.

Si bien por momentos el ritmo decae, el resultado es gratificante por tratarse de un producto diferente que construye (y destruye) la figura de nuestro primer superhéroe nacional. Cualquier semejanza con un simple mortal no es pura coincidencia.