Vivir para contarlo

Crítica de Alejandro Lingenti - La Nación

Una temporada en el infierno

Emiliano Di Giusto cuenta en primera persona una experiencia realmente difícil: la vida que llevó luego de que le diagnosticaron cáncer y los detalles del tratamiento al que tuvo que someterse. Suma testimonios de personas que pasaron por una situación similar. El director se maneja con prudencia, se aleja de los golpes bajos e incluso apela al humor para alivianar un asunto muy denso. Ese desprejuicio potencia el valor de las historias y ayuda a enfrentarse con este material. Obviamente, el tema que sobrevuela el documental es el de la relación con la muerte, ese que nos desvela no bien tomamos conciencia real de su llegada inexorable.