Videocracy

Crítica de Andrés B. Pohrebny - El rincón del cinéfilo

El documental como género cinematográfico –observado desde el especial tratamiento técnico de un proyecto-, si exceptuamos los de temáticas puramente tecnológicas, científicas o educativas, salvo aquellos que plantean aspectos aun en debate, aborda la convivencia humana considerándola en su macro y microcosmos desde el ángulo de visión de los responsables de la obra fílmica: el guión, la producción y la realización. Consecuentemente, la lectura del tema tendrá, cuando menos, un dejo de parcialidad respecto del asunto particular que se pone en consideración, por tratarlo sólo desde una perspectiva. La mayor imparcialidad la alcanza en el momento en que presenta las distintas caras que gravitan en la propuesta, dejando a juicio del destinatario (el espectador) la decisión final sobre los valores positivos y negativos del hecho en cuestión.

“Videocracy” en su sinopsis recapitula como en Italia se ha creado otro tipo de totalitarismo según afirma en su guionista y realizador Eric Gandini, el de la videocracia, donde todo es apariencia.

Silvio Berlusconi, el polémico empresario, político, y actual primer mandatario italiano, se manifiesta a sí mismo como una víctima, aun cuando ha sabido siempre serpentear todos los vericuetos para imponer el poder de la imagen sobre la realidad palpable.

La producción documenta una serie de cambios que ha experimentado la televisión de ese país en las últimas tres décadas, así como el desarrollo que ha tenido el Mediaset, empresa de comunicación presidida por Berlusconi, mediante la cual el cavalieri ha logrado dominar el 80% de la actual televisión de la península, detrás de la cual opera como hábil titiritero.

La obra analiza la relación entre la manipulación mediática y la construcción de una imagen exitosa Utiliza mayoritariamente material preexistente de una televisión que domina el panorama con criterio cuasi circense, radiografiada con adecuada selección de imágenes y un montaje apropiado para la realización que apunta a denunciar la operatividad del titular del ejecutivo italiano.