Una segunda oportunidad

Crítica de Diego Curubeto - Ámbito Financiero

La reincidencia, en buena comedia

Esta es una sólida comedia romántica sobre la mediana edad con un gran bonus: un despliegue del talento de James Gandolfini en el anteúltimo trabajo antes de su muerte. Gandfolfini se hizo famoso por pappeles de tipos inescrupulosos como el de Los Soprano (o, más recientemente, el del decadente asesino de la mafia en "Mátalos suavemente") pero su rango actoral era mayor, y esto se aprecia especialmente en este papel de un tipo bastante común y corriente, divorciado, que logra volver a enamorar a una mujer también divorciada que cree que ya no puede encontrar atractivo a ningun hombre.

En realidad, la verdadera protagonista de "Una segunda oportunidad" es el personaje de Julia-Louis Dreyfuss, que al mismo tiempo que empieza a enamorarse de Gandolfini se hace amiga de una poeta de vida sofisticada que se la pasa hablando pestes de su ex marido, por supuesto el mismo hombre en cuestión.

El truco de la película no es lo más original del mundo, pero la directora Nicole Hofcener, especialista en conflictos femeninos, lo utiliza muy bien, sobre todo cuando mezcla la historia principal con otras de personajes secundarios pero atractivos, como la también divorciada Toni Collette (salvo los hijos de Julia-Louis Dreyfuss, que se están por ir a la universidad, todos los personajes de esta película estan divorciados y tienen que sufrir la presencia cercana de una ex pareja).

"Una segunda oportunidad" tiene muy buenos gags, que realmente harán reir al publico sin dejar de ser una reflexión sobre las crisis de la mediana edad y la posibilidad de encontrar el amor en cualquier momento de la vida. Pero sin duda el fuerte de la película son las actuaciones. Todo el elenco tiene oportunidad de lucirse, y claro, es Gandolfini el que más se disfruta de todos.