Una noche de amor

Crítica de Pachi Laurino - Visión del cine

Una noche de amor, la nueva película de Hernan Guerschuny con Sebastian Wainraich y Carla Peterson.

Wainraich es Leonel, un guionista casado desde hace 12 años con una psicóloga llamada Paola (Carla Peterson). Habituados a la rutina y a sus dos hijos, los protagonistas se encuentran con la posibilidad de disfrutar de una noche en soledad. El problema es que la salida pensada se transforma en una prueba para la pareja.

Una noche de amor está escrita, producida y también protagonizada por Wainraich.

Los personajes se ven como reales, y en este tipo de historias es necesario que los espectadores empaticen con ellos. El problema es quizá que son reales, pero no hay, en especial en el personaje de Wainraich, diferentes tonos actorales que requerirían estas historias con tantos vaivenes emocionales.

Guerschuny tuvo un buen debut con su película El Critico, y en este su segundo filme, vuelve a hacer las cosas bien. No solo la forma en que nos presenta a esta pareja, sino también los bares nocturnos, las calles y la noche misma de Buenos Aires están muy bien retratados.
Dentro del guion de Una noche de amor existen varias metáforas de la relación de pareja y sus conflictos, el problema es que están muy subrayadas y termina siendo casi como si los personajes nos dijeran algo que en teoría solo querían insinuar.

Carla Peterson esta impecable en su papel y la química entre ellos es perfecta.

Una noche de amor no es una comedia, es un drama, una noche de una pareja que convive con el hastío y que tiene momentos de comicidad que se prestan mas para descontracturar situaciones incomodas que como un genero en sí.