Una aventura extraordinaria

Crítica de Fernando Alvarez - Todo lo ve

El arca de Pi

Del director Ang Lee llega esta fascinante película basada en el best-seller de Yann Martel (2001), que muestra la odisea de Pi (Suraj Sharma), un niño hindú cuya familia decide mudarse de la India a Canadá con su zoológico en los años setenta para lograr un futuro mejor. Sin embargo, la travesía en barco se convertirá en una pesadilla.

El cineasta taiwanés de Secreto en la montaña y El Tigre y el Dragón narra a manera de "flashback" la historia que el protagonista adulto le cuenta a un escritor: su odisea de supervivencia en medio de un mar furioso luego de perder a su familia.

En Una aventura extraordinaria la sorpresa se hace presente en una trama que esconde una segunda lectura y que torna más interesante la visión del náufrago en cuestión. Mezcla de fábula espiritual y religiosa con el cine de aventuras, la película hace gala de sus efectos en 3D que alcanzan momentos atrapantes.

Ang Lee se las ingenia para mantener el bote a a flote y el interés del espectador a través de un film que tiene más de lo que aparenta. Ya se sabe del cuidado estético que imprime el realizador en sus trabajos, logrando paisajes de gran belleza a través de tomas cenitales en las que Pi y su endeble embarcación parecen insignificantes en la inmensidad y los peligros que le aguardan en el oceáno.

Cada fotograma es un cuadro y su imaginación le permite jugar con elementos oníricos de gran impacto en la pantalla, además de la aparición de Gerard Depardieu como un cocinero inescrupuloso.

La película hace foco en la relación y la lucha "territorial" que entablan Pi y el tigre Richard Parker a bordo del bote salvavidas, un combate por el espacio (con cadena animal alimenticia de por medio) que muestra momentos de humor. Una aventura extraordinaria es, antes que nada, un gran espectáculo visual, repleto de peligros, obstáculos y emoción. La elaboración personal ante las pérdidas cobra dimensión dramatica en los minutos finales.