Tuya

Crítica de Diego Papic - La Agenda

Otra buena adaptación de una novela de Claudia Piñeyro

Tuya es ya la tercera adaptación al cine de una novela de Claudia Piñeiro y aunque quizás no sea la mejor, la trama está tan bien construida que por momentos merece que uno haga la vista gorda con algunas de sus falencias.

Puede decirse que Tuya es una película de suspenso o bien una comedia negra o ambas cosas. El ambiente, como suele ocurrir con las historias de Piñeiro, es el de la clase media alta porteña y el punto de vista es el de una mujer. Todo observado con una mirada filosa e irónica.

La protagonista es Inés (Andrea Pietra), que apenas empieza la película descubre un poco por accidente que su marido la engaña. En lugar de confrontarlo, porque sabe que una confrontación equivale a una pelea y ella lo único que quiere es mantener al menos ese simulacro de matrimonio, lo vigila y lo sigue hasta que es testigo de una situación violenta entre su marido y su supuesta amante que termina en la muerte de ella. Inés, entonces, más aliviada por la desaparición de la rival que preocupada por el asesinato que cometió su marido, lo ayudará a ocultar el crimen.

Ese es el puntapié inicial de una historia que tiene algunas vueltas de tuerca y que avanza firme. Siempre queremos saber qué va a pasar después, el tono de Pietra y de Jorge Marrale –que interpreta muy bien a su marido, aunque quizás no dé con el physique du rol– es de lo mejor y entre los dos logran tres o cuatro escenas que condensan un humor negro que habría sido bienvenido en más momentos.

A la par de la historia de ocultamientos y crímenes de Inés y su marido, está la historia de su hija adolescente. Laly (Malena Sánchez) tiene 17 años y a pocos días de irse de viaje de egresados se entera de que está embarazada. El padre de su hijo no quiere saber nada y ella no se anima a contárselo a sus padres, entonces lleva adelante el embarazo, ocultándolo con una faja.

El planteo es ácido y redondo. Cada jugador cumple su rol muy bien. El único problema está en un par de escenas, que para colmo son escenas clave en la trama, que no terminan de resultar del todo verosímiles. Y también en el personaje de Inés que no termina de estar pintado de forma tal de que uno entienda o acepte ciertas actitudes o decisiones.

Tuya está un escalón por debajo de Las viudas de los jueves y Betibú (creo que las tres películas son más parecidas entre sí que entre las otras películas de sus respectivos directores), pero igual funciona bien casi siempre.