Trueno y la casa mágica

Crítica de Diego Serlin - Todo lo ve

La vertiginosa aventura del gatito

Sin un elenco de voces famosas, pero con singulares personajes y una sencilla pero eficaz trama, esta animación belga entretiene a niños y adultos por igual.

De los creadores del éxito internacional Las aventuras de Sammy -2010- llega esta producción belga, dirigida por Jeremy Degruson y Ben Stassen y basada en un corto animado llamado Haunted Castle, producido hace una década en 3D IMAX para un parque de atracciones.

Trueno y la casa mágica tiene como protagonista a un joven gatito que es abandonado por sus dueños y busca refugio en una misteriosa mansión, propiedad de un viejo mago llamado Lawrence, quien vive junto a dos mascotas y una deslumbrante variedad de peculiares inventos creados por él.

Aunque al comienzo no es bien recibido por las mascotas del señor Lawrence, luego deberán unirse para luchar contra el sobrino de Lawrence que intenta engañar al viejo mago para vender la casa y quedarse con el dinero.

Una vieja casona que parece embrujada y un entrañable gatito, junto a rarísimos y simpáticos personajes, componen esta historia en la que impresionantes travellings -que justifican la principal atracción de aquel film en 3D que le dio origen-, sombreros de copa, actos de magia y una colorida animación, imponen un ritmo vertiginoso a una trama sencilla que entretiene y mantiene a niños y adultos atentos a la pantalla en el tiempo justo.

Trueno y la casa mágica es una película de animación independiente de las grandes compañías y sin un elenco de voces famosas, que a través de una historia sencilla, una digna animación y algunos raros personajes, hasta se da el lujo de llevar al público menudo mensajes como el de la inclusión, el respeto hacia los adultos mayores y la importancia del trabajo en equipo, así como algunas bajadas de línea para adultos vinculadas a ciertas crisis económicas. El film no tiene mayores pretensiones más que el disfrute de toda la familia, y cumple eficazmente.