Todo por el ascenso

Crítica de Gimena Meilinger - Cinergia

El colorado mufa

Jorge Piwowarski debuta como director con una comedia acerca del fanatismo sobre el fútbol y la amistad, con la participación de Ariel Pérez de María y Tomás Fonzi.

Toda road movie tiene ese tono de comedia y drama donde los protagonistas, a través del viaje geográfico, también hacen uno introspectivo donde cambian su manera de ver el mundo. Todo por el ascenso hace que 3 amigos viajen al interior de la Argentina para cumplir el sueño de ver a su equipo ascender de categoría.

Néstor (Ariel Pérez de María) es extremadamente supersticioso. Este año su equipo se juega el ascenso en Mendoza y se dispone a viajar con Rafa (Tomás Fonzi), su amigo. Pero su amigo pelirrojo Fabián (Fernando Govergun), vuelve de Colombia para este evento. El ascenso está en peligro, a menos que puedan evitar que el “yeta” de Fabián llegue a la cancha.

Todo el viaje va a ser una odisea intentando evitar que el colorado presencie ese histórico partido. Entre tanto, se generan varias subtramas con divertidos personajes secundarios que crean situaciones disparatadas y muy divertidas. Los actores principales funcionan a la perfección en el trío de amigos con personalidades contrapuestas pero unidos por la pasión del fútbol y el cariño de la amistad de años.

El fanatismo futbolero, la exacerbada superstición y los valores sobre la amistad se conjugan en una comedia ligera y divertida. Hay reflexiones de todo tipo que le dan algo de profundidad al momento de la moraleja de la road movie y el ritmo narrativo dinámico junto a las buenas interpretaciones logran una película muy entretenida.