The Iceman

Crítica de Luis María Fittipaldi - RosarioCine

Nacido para Matar

Si bien no está comprobado la verdad acerca de que Mr. Richard Kuklinski hubiese aniquilado a tanta cantidad de gente como se le adjudica, el caso es real, este inmigrante polaco que fué apresado después de cometer incontables crímenes entre los años 60 y 80. Igualmente atroz si tenemos en cuenta que en 20 años el tipo nunca había sido ni detenido ni sospechado, ocultando su oscuridad demencial con la fachada familiar de una esposa e hijos, esto es un sólido padre de familia.
El mote de "Iceman" tenía que ver con la costumbre de congelar los cadáveres de algunas de sus víctimas para confundir a la policía y a los forenses.
Un filme de naturaleza violenta sobre un personaje psicótico y feroz no podía tener otra actuación protagónica que la de un estupendo rostro y talento, y ahí esta un férreo Michael Shannon (el desequilibrado de "Solo un sueño" (2008) que confunde a Di Caprio Y la Winslet, o también perturbado constructor de un refugio en el campo para una catástrofe que preanuncia en "Take Shelter" (2011), o más reciente aún el despiadado General Zod de "El Hombre de Acero" (2013)), es decir un actor con todas las letras, lo cual sostiene de manera genial la trama, la cual se ajusta al cine "Noir", un thriller de a ratos tremendo, bien contado y filmado, y que también trae en su elenco a otros nombres que conforman la redondez de la propuesta; una reaparecida Wynona Ryder en el rol de la abnegada esposa, mas Chris Evans ("El Capitán América"), Robert Davi, Stephen Dorff, James Franco y un siempre al borde del exceso: Ray Liotta.
A los degustadores de los platos fuertes, les atraerá conocer las andanzas de este frío asesino que aseguraba siempre "No mato ni mujeres ni niños".