Ted Bundy: Durmiendo con el asesino

Crítica de Damián Serviddio - Conexión abierta

En 1969 Ted Bundy conoce en Seattle a quien sería durante varios años su novia, Liz. Para 1974 una serie de asesinatos de mujeres empiezan a tener un factor en común y se difunde una ilustración del supuesto homicida. La imagen guarda un increíble parecido con Ted, pero nadie de su entorno parece reparar en ello. Bundy es detenido en Utah al año siguiente por no respetar las velocidades máximas con el auto y cuando la policía realiza la pesquisa del mismo encuentran ciertos elementos que lo transforman en el principal sospechoso de los crímenes. Comenzado el juicio, en 1976 se vinculan los crímenes de Seattle con los de Utah y a partir de allí la coartada de Ted es cada vez más endeble. Él afirma que es inocente y que las pruebas fueron plantadas en su contra. ¿Podrá Liz creer lo que le plantea su novio o será ella un elemento fundamental para poner fin a esta matanza de mujeres inocentes?