Spiderman: a través del spiderverso

Crítica de Rodrigo Rivas - Cine Argentino Hoy

pider-Man: a través del Spider-Verso llegará el 1 junio a los cines argentinos, con Miles Morales de vuelta, ya siendo un héroe con un poco más experiencia, se enfrenta a un nuevo problema con peligros muchísimos más grandes.

Dirigida por Joaquim Dos Santos y Kemp Powers y producida por Phil Lord y Christopher Miller. El elenco está compuesto por Shameik Moore, Hailee Steinfeld, Oscar Isaac, Jake Johnson, Issa Rae, Brian Tyree Henry, Luna Lauren Velez, Daniel Kaluuya, Jason Schwartzman y Shea Whigham.

Más de un año después de los eventos de Spider-Man: un nuevo universo (2018), Miles Morales se asentó como el nuevo y único Spider-Man. Luchando entre su vida personal y de superhéroe, la cual le trae varios problemas con sus padres, Gwen Stacy regresa para evitar que Jonathan Ohnn / The Spot, continúe alterando todos los multiversos. Esto provoca que Miles conozca a la Spider-Society, los cuales protegen el multiverso, pero resulta que todo lo que hacen y sucede, no es lo que parece cuando Miles interviene y él se vuelve la amenaza.

Vamos otra vez

En esta nueva entrega se muestra a un Miles más seguro de sí mismo como Spider-Man y cada vez más poderoso, su gran problema es cómo trata de llevar su vida personal y de superhéroe sin que sus padres lo sepan, algo que teme decirles. Fuera de este percance, el “villano de la semana”, como así lo bautiza Miles a The Spot, está alterando la realidad y la Spider-Society lo está buscando, algo que lleva a que Gwen regrese con Miles para pedirle ayuda.

The Spot se va transformando en un villano cada vez más poderoso, al punto que planea destruir toda la realidad de Miles y de los demás Spider-Man que se interpongan. Esto lleva a que Miles deba tomar decisiones muy difíciles y el problema sea mucho más grande para el héroe de Brooklyn.

Spider-Woman

La segunda parte le da mucho más protagonismo a Gwen Stacy y muestra su vida personal, previo y luego de lo que le sucedió a su Peter Parker. Un gran percance con un villano de otro universo la lleva a conocer a Miguel O’Hara / Spider-Man 2099, el líder de la Spider-Society, quien la reclutó a regañadientes para detener a más amenazas.

La relación entre Gwen y Miles se va estrechando cada vez más y la química entre ambos también aumenta, no solo por la dinámica que tienen al compartir los mismos poderes, sino que también lo es por cómo se apoyan el uno al otro a pesar de lo que les sucedió para ser quienes son.

Somos los buenos

Miguel O’Hara trata de hacerle entender a Miles que todos los que ahora son Spider-Man sufrieron y eso los transformó en quienes son ahora. Por lo que Miguel pretende que Miles no altere nada más en el Multiverso, o eso va a provocar un caos incontrolable, en donde él, no tiene voto y tampoco puede participar. Esto Miles lo ignora y lleva a que todos los miembros de la Spider-Society se pongan en su contra, dejándolo sólo contra todo un universo.

Las acciones cometidas en esta segunda entrega tienen muchas consecuencias, algo que Miguel plasma, pero que lo aplica de una forma muy poco convencional, provocando que él sea visto más como un anti-héroe o casi un villano.

En resumen

Una nueva película, una nueva aventura y problemas mucho más grandes pulen las habilidades de Miles y su desarrollo personal como un superhéroe, teniendo que transformarse en un adulto a pesar de ser solo un adolescente.

Visualmente continúa con su increíble animación, ya que ahora mezcla también el realismo dentro de la película. La banda sonora compuesta por Daniel Pemberton acompaña muy bien al filme y el desarrollo y decisiones de cada personaje los llevan a enfrentarse incluso, a sí mismos.

Una secuela que aumenta el nivel y que deja con muchísimas más ganas y saber qué es lo que sucederá en su tercera película.