Spider-Man: lejos de casa

Crítica de Damián Serviddio - Conexión abierta

Finalmente llegó la última película de la fase 3 de MCU y tiene a Peter Parker enfrentando el duelo de las pérdidas en Avengers: Endgame. La sociedad está reconstruyéndose luego de los cinco años en donde desapareció gran parte de la humanidad; todo está el un estado frágil y delicado, con Nick Fury tratando de reconfigurar la iniciativa de los héroes vengadores. En medio de cansancio extremo y de la inestabilidad emocional, Peter se suma a un viaje escolar con sus compañeros para recorrer varias ciudades europeas. Tal vez sea la oportunidad de descansar y de animarse a dar el paso clave con M.J. y expresarle sus sentimientos. Las vacaciones no durarán mucho. Spider-Man será requerido una vez más cuando los Elementales, criaturas destructivas réplicas de las vistas en otros planetas, empiezan a destrozar ciudades en su camino por arrasar el mundo. Peter contará con la ayuda de Misterio, un extraño héroe, desconocido hasta el momento, que tiene la clave de cómo evitar la aniquilación total.