Son como niños 2

Crítica de Luciana Boglioli - La Capital

Segunda infancia

Adultos comportándose como niños, esa es la cuestión de la secuela de "Son como niños", una comedia pasatista, que no resulta del todo entretenida. Después de mudarse con su familia de regreso a su ciudad natal para estar con sus amigos y sus hijos, Lenny (Adam Sandler), descubre que entre los conductores de autobús esquizofrénicos, policías borrachos sobre esquíes y 400 colados a una fiesta de disfraces, a veces ocurren situaciones locas. El filme presenta situaciones conflictivas e inmaduras, como quejas sobre el matrimonio, de la mano de Salma Hayek, Maya Rudolph y Maria Bello, y la necesidad de fiesta de sus hijos que terminan descontrolados. En definitiva, se trata de una comedia sobre cuarentones en un eterno plan adolescente. No tan alejado de la realidad.