Soi Cumbio

Crítica de Jose Luis De Lorenzo - A Sala Llena

La temática del éxito mediático se ve reflejada en el documental argentino de la directora Andrea Yannino Soi Cumbio, recientemente exhibido en el pasado BAFICI. El film abarca la instancia en que Cumbio, una niña flogger se vió envuelta en un fenómeno que bien pudo llevar adelante teniendo en cuenta su temprana edad, una instancia que generó millones de visitas via internet, entrevistas para gráfica, tv, publicidades de prestigiosas marcas de calzado deportivo y hasta traspasar continentes. La popular sobre-exposición es aquí enfocada sobre la cotideaneidad, la mirada de sus padres, el alrededor conformado por amigos, su entonces novia y seguidores.

Cumbio se convirtió en un fenómeno, y lo que aquí se evidencia es que desde el humilde lugar en que se vió situada, muchos aprovecharon la mediática situación para valerse de shows que convocaban a toda una generación que se veía reflejada en ella, que consumía los mismos productos como es la vestimenta, corte de cabello, gustos musicales y tecnología digital, virtual y telefónica. Soi Cumbio, nos muesta bien de cerca el panorama de la demonización de los medios, la fascinación de personas humildes por entrar en lo que para la televisión es la fama, y el reconocimiento inmediato, una movida cultural flash.

Cumbio es Agustina Viveo, apodada asi por su gusto sobre el género musical, su página de internet alcanzó picos de millones de seguidores, quienes atentos a los movimientos de la adolescente acuden a toda convocatoria realizada con el simple objetivo de romper la barrera digital y conocerse personalmente, toarse fotografías, firmar autógrafos y convertirse así en un ídolo o referente juvenil. En cierta manera representante de una juventud no escuchada por los mayores, especialmente los padres, su devenir en comunicadora de una parte de la sociedad lo vió involucrada en recorridos por el interior de nuestro país, convocando a charlas y debates como así a tortuosas operaciones de lugares bailables para convocar público gracias a su presencia y como denuncia ésta en el documental, volver a su casa con tan solo cien pesos. Cumbio, por momentos, sólo apreciables en este delicado documental muestra su faceta interna, la de ser hija. Alli la cámara observadora de Andrea Yanino no urga, sólo documenta rostros, gestos, conversaciones que terminan por mostrar las flaquezas de Cumbio, como toda persona frente a un fenómeno que la sobrepasa. La fama es hermosa si se la sabe manejar, pero esta, escapa de sus manos. Un gesto de cariño hacia su madre, sólo llega ante un escrito en su sitio de internet, no con un abrazo ni un beso. Cumbio siente, cuida a su novia, la cela y distingue claramente al responder a periodistas sobre su intimidad, sexualidad y definición. En cierta manera, y teniendo su edad, le tapa la boca a mas de uno.

Soi Cumbio es un documento valorable a la hora de querer entender qué es un blog, un fotolog, una web site, cómo son administradas, qué generan del otro lado, quienes las consumen, y el poder de esta no ya tan novedad que revolucionó la era digital tras el advenimiento de internet. Las nuevas formas de colectividades a través de distintos caminos y maneras de establecer el vínculo.