Sin dejar rastros

Crítica de Roberto Iván Portillo - Naranjita Cine

¿Quién fue Quirino Cristiani? Esa pregunta nos hundirá en este documental sobre más que la historia de una persona, también será sobre los inicios de la animación universal.

En 1917 se estrenaba en Argentina “El apóstol“, la primera película animada de la historia realizada a mano por el mismísimo Quirino Cristiani. Además de ser pionero en esta nueva forma de hacer cine, fue uno de los impulsores del mismo (y no dejó de hacer animación hasta que pudo).

El director Diego Kartaszewicz se sumerge en la historia de no sólo de la animación, sino de la propia Argentina para colaborar las causas misma de sus creaciones. “Las primeras animaciones eran políticas, era para adultos.”, como bien se dice en el largometraje.
De la mano de su nieto, Héctor Cristiani como locutor y narrador, vamos descubriendo las diferentes facetas que tenía el olvidado cineasta tanto íntimas como sociales. Su relación con los momentos políticos y, entre otras cosas, su vínculo con figuras de la animación de ayer y hoy como fue la llegada de Walt Disney a Buenos Aires y su asombro al ver el estudio del italo-argentino.

La obra “El apóstol”, precursor a todo animación antes vista, fue una sátira política y que en la producción de es recreada a través de las declaraciones y de diferentes documentación ya que la versión original no se obtienen ningún tipo de registro porque terminó hecho polvo luego de un incendio de los estudios de Cristiani. Lo único que se pudo recatar de dicho desastre fue una copia de “El mono relojero“, ya alejado de las primeras creaciones del historietista y de sus críticas al régimen vigente.

Pero no sólo son películas en la vida de el animador, también veremos su versión paternal, sus juntadas artísticas, su hogar en las lejanías del interior, su amor por los animales. Todo conformó al dibujante para pensar y crear su estilo en el cine nacional.

Testimonios de diversos de artistas plásticos le honra memoria en el video de una hora. Desde Juan Pablo Zaramella hasta Manuel García Ferré hacen un enorme trabajo para darle una nueva imagen a Cristiani: La olvidada, la no documentada, la que hace falta.