Ser luthier, manos argentinas

Crítica de Catalina Dlugi - El portal de Catalina

Meterse en el mundo de los que fabrican, crean instrumentos musicales es una invitación fascinante. En especial porque quienes dan sus testimonios no vacilan en confiar sus secretos, su formación, como se transformaron en profesionales, la manera en que viven, cual es su filosofía, sus sueños, su relación con cada instrumento que crean. Cada historia tiene su encanto y uno es más interesante que otro. Con la convicción verdadera de que se trata de invitación a un mundo privado, silencioso, solitario y siempre artístico. Dos jóvenes directores idearon este trabajo tan lúcido, interesante y seductor: Rocío Gauna y María Victoria Ferrari. Un placer del principio al fin y una oportunidad para conocer a una raza de artesanos talentosos.