Santiago, Italia

Crítica de Catalina Dlugi - El portal de Catalina

Es el retorno al documental de Nanni Moretti, después de 30 años. Aquí se ocupa de los refugiados en la Embajada de Italia, en los meses siguientes al golpe de Pinochet en Chile. En total entre niños y adultos se refugiaron 250 personas. Este trabajo tiene una premisa muy clara: en la mitad del testimonio de un militar preso, que justifica el golpe y dice que no se cometieron crimines de lesa humanidad, el realizador le  aclara que “no es imparcial”. Una declaración de principios y honestidad.  Los testigos y protagonistas tienen su oportunidad para el recuerdo pavoroso, para la interpretación, el dolor. Tres colegas aparecen en este trabajo: Patricio Guzmán (“El primer año”), Carmen Castillo (viuda de uno de los fundadores del MIR) y Miguel Littin (“Actas de Marusia”, “Alsino y el cóndor”). Ellos se involucraron especialmente en la esperanza que encarnó Allende. La imagen del presidente se ve junto a Pablo Neruda, en el momento triunfal del comienzo de su gobierno.  Hay quien justifica la delación bajo tortura y quienes tienen anécdotas personales del bombardeo del Palacio de la Moneda. Testimonios escalofriantes, opiniones divergentes. El formato  es tradicional.