Rumbo al mar

Crítica de Martín Pérez - DiarioShow

El gran homenaje a Santiago Bal

Quizás el mejor homenaje que le podía hacer su hijo, Federico, era llevar a su padre a la pantalla grande por última vez, y trabajar a la par, para realizar una película con intenciones emotivas y reflexivas. Sin embargo, el resultado es fallido.

En los créditos se lee "A la memoria de Santiago Bal. 1936-2019". Por desgracia, el hecho de que tanto en la vida real como en la historia todo sea "por última vez", genera una confusión, porque el golpe bajo es ineludible, mucho más cuando el estreno llega a poco tiempo de la muerte del actor.

La historia es la de Julio Pereyra (Santiago Bal), al que le diagnostican un cáncer avanzado y le indican que le queda un mes de vida. Por ello decide que quiere pasar sus últimos días lejos de hospitales y medicamentos, y resuelve viajar con Marcos (Fede Bal) en moto a conocer el mar.

En el camino se encuentran con amores del pasado (Zulma Faiad), y demás personajes que les hacen el viaje más dificultoso, con el único propósito de sumarle enredos y gags de escasa efectividad. Seguramente funcionará como despedida para Fede, su familia y sus fans.