Rompecorazones

Crítica de Hugo Zapata - Cines Argentinos

Vanessa Paradis es una artista francesa muy completa que es más reconocida en Europa por sus trabajos en la música que en el cine, pese a que hizo muy buenas películas. En América es más famosa por ser la pareja de Johnny Depp que por sus discos y filmes. La última película de ella que llegó a los cines argentinos fue La chica del puente, en 1999, una gran y loca historia de amor del director Patrice Leconte, que protagonizó junto a Daniel Auteuil.
En este caso se destaca en una entretenida comedia de enredos que seguramente a más de uno le va a traer al recuerdo otros títulos hollywoodenses como Los rompebodas (Vince Vaughn) y Las seductoras (Sigourney Weaver) que también tenían que ver con sátrapas que interferían en parejas ajenas.
De hecho esta última película mencionada comparte el título original, Heartbreakers
(Rompecorazones), con este estreno.
Dentro de las cosas que llegaron a la cartelera, en lo que se refiere a la comedias
románticas, esta propuesta dentro de todo es una muy buena opción.
La narración de la historia es entretenida y tiene varios momentos graciosos que están
muy bien llevados por los dos protagonistas. Rompecorazones está más en sintonía con
las viejas comedias románticas hollywoodenses de los años ´60 que por el cine francés.
La dirección corrió por cuenta de Pascal Chaumeil, otro discípulo de Luc Besson que se
lanzó a dirigir películas luego de trabajar como asistente del famoso cineasta en filmes
como El perfecto asesino, El quinto elemento y Juana de Arco.
Actualmente se encuentra en producción la remake norteamericana de Rompecorazones
por lo que es una buena oportunidad para ver la original con la bella chica de los dientes
separados