Rompecorazones

Crítica de Claudio Lo Iacona - Todo lo ve

El adorable seductor

El realizador Pascal Chaumeil, quien trabajó como ayudante de dirección en Juana de Arco, El Quinto Elemento y El Perfecto asesino, toma el timón y lleva adelante esta comedia romántica con toques de espionaje.

Alex (Duris) es un irresistible y encantador profesional dispuesto a todo para interrumpir un casamiento. En pocas semanas y por honorarios acordes a su reputación, promete transformar a cualquier marido, novio o prometido en un ex, mediantes trampas, intervención de teléfonos, identidades falsas, frases inquebrantables y lágrimas de cocodrilo. Cualquier cosa sirve para cumplir el contrato.

Juliette (Paradis) será la joven víctima, heredera de una gran fortuna, apasionada por la música de George Micheal y la película Dirty Dancing. En diez días, se casará con el hombre de sus sueños (Andrew Lincoln) con la absoluta desaprobación paterna. Y Alex debe impedirlo…

La cinta tiene momentos de alto vuelo y situaciones inteligentes que la alejan de las comedias comunes. Más el agregado de un simpático reparto (La hermana de Alex y su cuñado) y la persecución de unos implacables acreedores hasta el desenlace.

El espectador paseará por las arenas del desierto, pasando por hermosas calles parisinas, y hasta la lujosa ciudad de Mónaco, donde el protagonista descubrirá “en carne propia” que, cuando de amor se trata, el plan perfecto no existe y hasta el más profesional puede enamorarse.