Rojo

Crítica de Marianela Santillán - Proyector Fantasma

Ficha técnica: Origen: Argentina, Brasil, Francia, Holanda y Alemania. Director: Benjamín Naishtat. Duración: 110 min. Año: 2018. Elenco: Dario Grandinetti, Andrea Frigerio, Alfredo Castro, Diego Cremonesi, Laura Grandinetti, Susana Pampin, Mara Bestelli y Rafael Federman. Estreno: 25 de octubre de 2018.

Rojo, la tercera película dirigida por Benjamín Naishtat (Historia del miedo, El movimiento) inicia con una escena tan gloriosa como inquietante: es 1975 y un montón de personas se dedican a sacar muebles y poco a poco vacian una casa en un barrio de provincia.

A continuación la acción se sitúa en un restaurant en el que el doctor Morán (Dario Grandinetti), famoso y respetadísimo abogado del pueblo, está esperando a su esposa pero esa espera desata la ira de un recién llegado comensal (Diego Cremonesi) que desea una mesa para comer pronto. Obviamente lo que comenzaba como una cena tanquila, termina en tragedia anunciada.

Así, Naishtat nos introduce en el universo del caos, porque en Rojo todo luce calmo pero nada es lo que parece y en este pueblo chico, infierno grande, el conflicto está a la orden del día. Conjuntamente el Estado municipal es intervenido y el fantasma del más crudo Golpe de Estado en la historia de nuestro país, empieza a amenazar.

En este sentido, si bien lo central en Rojo es una trama policial que involucra a un abogado, un hippie y un detective, la película trata mucho más que esas cuestiones: nos presenta diversas microhistorias marcadas por la mentira, la violencia, el abuso de poder y la codicia, a la vez que exhibe a una sociedad miserable y corrupta. Pero lejos de ser una película sobre la dictadura militar, aquí el enfoque de ese momento histórico está puesto en esos ciudadanos de a pie, en lo cotidiano, y tal vez es eso, lo que genera tanta incomodidad desde la mirada del director y desde la del espectador al ser testigo de esta paulatina fragmentación social.

Rojo resulta un festival visual y narrativo que sin dudas será una de las películas más interesantes del año 2018, tanto por los temas que aborda, como por la forma de presentarse y la particular visión del director. Imperdible.