Rex

Crítica de Adolfo C. Martinez - La Nación

Certero y angustioso romance

La vida cotidiana de Rex no es fácil. Es joven, introvertido, trabajador, recto y fuerte, y no acepta abusos. Habita en la casa de sus padres adoptivos quienes lo tratan con cariño, pero él es un permanente insatisfecho atormentado por las dudas y el desconocimiento de su origen.

En uno de sus paseos nocturnos se defiende ferozmente de un borracho acosador con quien pelea hasta matarlo y decide dejar su casa. Entonces su existencia cambia de rumbo, consigue otra vivienda y un nuevo trabajo e inicia una relación con una mujer mayor que él, y en esa atracción mutua ambos se unen apasionadamente usando sus cuerpos para calmar angustias y soledades. Ella, sin embargo, se enfrenta a su hermano, un oficial de policía, determinada a reconstruir la familia perdida.

El director Fernando Basile recorrió con pasión esta historia en la que Rex halla en su pareja una razón para vivir, totalmente ignorante de los acontecimientos que se avecinan. Así la trama va desovillando la personalidad de estos dos seres que, de pronto, descubren un trágico pasado que no pueden remediar.

Con una cámara atenta a cada gesto y a cada palabra de sus protagonistas, el realizador logró un film austero, por momentos inquietante y siempre dispuesto a las sorpresas. El elenco apoyó con calidad esta historia que habla de retazos de felicidad y de angustias permanentes.