Retratos de Eugenia

Crítica de Alejandro Lingenti - La Nación

Como artista visual, Eugenia Bekeris dedicó su carrera a preservar la memoria de hechos históricos de una importancia indiscutible: el Holocausto, la represión ilegal en la última dictadura militar en Argentina, la violencia contra los pueblos originarios. Su obra enfoca esos acontecimientos atravesados por la tragedia con una mirada crítica y siempre atenta a los valientes gestos de resistencia. También se puede inferir ahí un deseo de exorcismo, una voluntad de traducir la angustia y el dolor a los términos del arte.

Retratos de Eugenia logra meternos en la intimidad de esta creadora manteniendo siempre el decoro para acercarse al personaje. Es un documental sobrio pero elocuente en el que Juan Manuel Repetto vuelve a encontrar un tema importante y no tan explorado, como lo había conseguido con Fausto también (2015), la historia de un joven autista que decide ingresar a la universidad argentina.

El de Bekeris es un caso singular e interesante: alguien que se obstina en reconstruir una identidad diluida, dañada, con el arte testimonial como herramienta principal. Su trabajo -que incluye la documentación en notas y dibujos de juicios de lesa humanidad- está claramente apoyado en la investigación, pero su vía de interpelación es más sensible que científica. Y la película refleja con sutileza esa historia personal en la que tantos se reconocerán, seguramente, incluso cuando la emoción tiñe todo el ambiente.

Alejandro Lingenti