Respirar

Crítica de Migue Fernández - Cinescondite

Julia está en crisis. Su marido la dejó, está en proceso de vender la casa en la que vive, no tiene trabajo o perspectivas de conseguirlo y además descubre que está embarazada. Se ahoga en sueños, pero esa sensación persiste cuando abre los ojos y sale a la vida. Le cuesta respirar, el peso de sus pérdidas son acuciantes y le quitan el aire. Parece al borde de la locura. Su manera de comportarse la llevará a transitar una fina línea. Actuará de forma cada vez más aleatoria, sin ser una demente pero evidentemente perturbada. En sus breves 64 minutos de duración, Respirar nos adentrará en la realidad de una joven con una necesidad cada vez más desesperante por salir del agua que la rodea, que elige tomar atajos y utilizar el engaño como una forma de mantenerse a flote, solo para volver a sumergirse a una mayor profundidad.