Red

Crítica de Elena Castelli - El rincón del cinéfilo

Lograda simbiosis de acción y humor por veteranos que se divierten... y divierten

Escrita por Jon y Erich Hoeber, “Red” es una adaptación del comic sobre la vida de Frank Moses (Bruce Willis), un agente secreto retirado que decide volver a la acción cuando intentan asesinarlo, para lo que recurre a su antiguo equipo a fin de que lo ayuden para juntos descubrir por qué, habiendo sido los mejores de la CIA, ahora los persiguen por los secretos que ellos conocen, y por ese camino también se darán cuenta de grandes conspiraciones del gobierno por que son el blanco de la agencia.

Este es una realización que contiene mucha acción, algo de romance y bastante humor. Los productores parece haber sostenido un guión que en el desarrollo de la historia se haya pensando en Helen Mirren para animar el personaje de Victoria, espía y asesina retirada. John Malcovich ratifica una vez más, si ello fuera necesario, su gran calidad de actor al realizar una excelente composición de Marvin Buggs, quien fuera víctima como miembro de la CIA, al ser tratado durante 11 años con la aplicación diaria de LSD, un muy calificado especialista en explosivos, ahora ser solitario y ermitaño. Como no es de extrañar se destaca Morgan Freeman como Joe Matheson, quien en su retiro no ha perdido la costumbre de coquetear con las mujeres, que se une al grupo para ayudar a su amigo Frank y combatir al enemigo. El toque romántico femenino, junto a Willis, lo aporta Mary-Louse Parker animando a Sarah incursionando en la historia de manera equívoca. Ante una elenco tan sólido no desentonan Richard Dreyfus y Ernest Borgnine, dos reconocidos valores actorales con una extensa historia profesional.

Todo el plantel de intérpretes contaron con una muy buena dirección de Robert Schwentke, quien supo aprovechar la capacidad del elenco guiándolos con mano segura en un relato equilibrado donde la acción se integra a un humor fresco, fluido y muy bien dosificado. Los equipos del área técnica aportan a la obra oficio necesario para dar el marco apropiado.

En suma, una comedia muy lograda que el espectador disfruta en toda su extensión, últimamente ausente en los productos procedentes desde la fábrica de los sueños.