Rascacielos

Crítica de Leandro Porcelli - Cuatro Bastardos

Rascacielos: En llamas pero en pie.
The Rock salta a un edificio en llamas para probarle al mundo que puede ser el nuevo Tom Cruise.
Rascacielos promete una base más que tentadora: The Rock buscando rescatar a su familia en el edificio más alto del mundo mientras mercenarios invaden y comienzan un incendio. Aunque con una premisa así, e incluso con tan buen protagonista, son muchos incontables los ejemplos de decepciones que año a año le hacen mal al ya baqueteado nombre del género de acción. Lo que hace un tanto particular a Rascacielos, es que se trata de un proyecto de The Rock que no intenta combinarse con una comedia, sino que apunta a exprimir su carisma en el papel de héroe puro de acción que a pesar de estar en aprietos encuentra los momentos para tirar algún que otro one-liner.
Aparte de protagonizar, el luchador convertido en actor se encarga de estar muy metido en la producción de la película, y seguramente sea una declaración de su parte para avisarle al mundo de que no solo es la estrella de cine más rentable de la actualidad sino que esta listo para ser el nuevo Tom Cruise. El resultado es una película que entrega estúpida y entretenida acción pero que va más allá no dando el último paso hacia la completa ridiculez, sino que es un honesto intento por entregar una sólida película de acción clásica.
El film tiene un arranque incierto, donde se siente lo serio que es comparado con los proyectos de The Rock que agregan comedia sin pudor, pero por suerte la acción no se hace esperar demasiado. Además, Johnson es el único protagonista actual de acción que puede sostener con su carisma un comienzo que intenta verdaderamente establecer personajes. Porque aunque no van mucho más allá, la realidad es que la película logra establecer otros personajes más allá de su protagonista. No llegan a desarrollarse a tal punto, pero ciertamente las escenas sin Johnson igualmente se sienten como su propia película de acción sobre una familia atrapada en una guerra de mercenarios multimillonaria, un mérito gigantesco siendo que es usual en los films del género que el interés baje a cero cuando no esta su protagonista en pantalla.
La película juega con las expectativas y tiene en mente satisfacer incluso a los fanáticos del género, afortunadamente Rascacielos cuenta con muy buenas secuencias de acción, bien distribuidas y sobre todo tan entretenidas como inventivas. La decisión de que el personaje de The Rock tenga una prótesis en la pierna podría haber sido algo superficial que no tenga peso real pero prácticamente todas las escenas de acción tienen en mente las dificultades y posibilidades que trae la pierna ortopédica de su protagonista. Mientras trata de salvar a su familia, el personaje principal va a volverse una mezcla entre John McClane, Tom Cruise, algo de Schwarzenegger y hasta McGyver, todo dentro de un The Rock tan carismático y gigantesco como siempre.
Comedia o no, el público definitivamente va a encontrarse con unas cuantas risas, algunas por lo ridículas que son las secuencias de acción, pero todas calculadas y buscadas por la mente creativa del director Rawson Marshall Thurber (Pelotas en Juego, con Vince Vaughn y Ben Stiller). Logra mantener en todo momento un tono de seriedad que de todas maneras se sabe irreverente, y no tiene miedo alguno de moverse dentro de esa delicada área entre la tensión y el entretenimiento pochoclero puro.
Es una cinta recomendable para cualquiera que se vea tentado por la propuesta de el edificio más alto del mundo como arena para una película de acción pura con un The Rock como protagonista. Si nada de eso te llame la atención seguramente esto no sea para vos, mientras que si uno se encuentra en la duda puede estar tranquilo que Rascacielos se encarga de estar a la altura.