Rápidos y furiosos: Hobbs & Shaw

Crítica de Catalina Dlugi - El portal de Catalina

Es un spin off, una película dedicada a la mala relación entre los personajes de Jason Statham y Dwayne Johnson, un mercenario al mejor postor uno, un agente federal el otro que se vieron en la número 7 de la saga y ahora tienen la responsabilidad de entretenernos. Para los fanáticos de la sarie,  falta ese toque que solo Vin Diesel sabe dar y sus fans adoran.. Pero cada uno de los protagonistas tiene su público. Y si se trata de peleas y corridas de autos y hasta, como lo muestra el tráiler, enganchar un helicóptero en pleno vuelo, ya se sabe que “la roca” todo lo puede y Statham es el rudo antipático de siempre. Escrita por Cris Mogan que no encuentra nada original pero bate ingredientes: El mundo está amenazado por un virus que puede matar a media humanidad. Los musculosos se unen para combatir a una organización mafiosa que convirtió a Idris Elba (una presencia magnética increíble) es un soldado cibernético y casi imbatible que quiere ese virus que está en el cuerpo de la hermana de Jason Statham. Ella es Vanessa Kirby, del servicio secreto británico.  El toque familiar se acentúa hacia el final como para tener un sentido de pertenencia que caracteriza a los rápidos y furiosos, en Samoa.  Se incluye a toda la familia de Hobss con un bailecito haka  y todo, mas  mamá  que, ojota en mano,  domina a un verdadero ejército de forzudos. Un argumento de cosas vistas al servicio de las escenas de acción  pero más pensando en chicos que en  adultos, y sin sabores originales.