Posesión infernal

Crítica de Diego Curubeto - Ámbito Financiero

Para poner los pelos de punta al fan del terror más aguerrido

La primera "The Evil Dead" (estrenada en Argentina como "Diabólico") era un film de terror único. Su idea de un antiguo libro de ocultismo que despertaba los malos espiritus alrededor de la cabaña de un bosque era totalmente original para la década de los '80, igual que su mezcla de gore superaudaz (fue una de las películas más censuradas en la Inglaterra de la época) con humor lunático, que surgía no solo del estilo del director Sam Raimi, sino también del hecho de que, con su escaso presupuesto, tampoco podía tomarse el asunto totalmente en serio.

Esa combinación de terror con una comicidad casi propia de los Tres Chiflados se acentuó en la secuela "The Evil Dead 2: Dead by Dawn" ("Noche alucinante") que , de una manera también única, contaba prácticamente la misma historia, con el mismo protagonista (Bruce Campbell como el sufrido antihéroe Ash), pero acentuando a tope los niveles de humor.

Pasaron los años y luego de , entre otras cosas, "El hombre araña", Sam Raimi no tiene más problemas de presupuesto, así que cuando decidió producir una remake de la primer "Evil Dead", algo comprensible en medio de la ola de nuevas versiones de clásicos del terror ochentista, se lo encargó a otro director con la libertad de hacerlo como quiera, siempre y cuando juegue con una variación seria del mismo asunto.

Aun sabiendo que ésa es la propuesta de esta flamante "Posesión infernal", nadie podía prever que el director uruguayo Fede Alvarez se iba a tomar las cosas tan en serio: esta película está hecha para ponerle los pelos de punta al más aguerrido fan del cine de terror, con escenas terroríficas inimaginables y niveles de gore que se van volviendo más y más terribles a medida que inundan de sangre la pantalla. La nueva película funciona aun conociendo de memoria el original, ya que salvo la situación de la cabaña en el bosque y el libro ominoso -y por supuesto, la toma subjetiva del mal avanzando por el bosque, sello inolvidable de las "Evil Dead"- toda la historia es distinta, y tiene que ver con una reunión de amigos en la dichosa cabaña para que una chica deje de una buena vez las drogas que casi la están matando. Esto vuelve dramático el clima desde el principio (bueno, antes hay un prólogo donde alguien quema viva a una persona mñuy allegada) y ayuda a que los primeros síntomas de que algo anda horriblemente mal en el bosque puedan parecer delirios producidos por el síndrome de abstinencia de la protagonista.

Una vez que los demonios se despiertan, la película no da pausa, y lo único que se puede decir en su contra es que por momentos se pasa tanto de rosca con las situaciones espantosas que al final , sea de nervios o no, termina haciendo surgir risas frenéticas entre el público. La nueva "Evil Dead" está brillantemente filmada y actuada, con una fotografía oscura que ayuda a tener que imaginar cosas a pesar de lo gráfico de algunas escenas, y con un diseño de sonido que está entre lo más brillante en el rubro del cine fantástico. Igual que antes, con esta remake Sam Raimi sigue decidido a que la franquicia "Evil Dead" sea algo único. Y de paso nos presenta a un director ultra talentoso que seguramente hará más cosas importantes en el género , Fede Alvarez al que conoció viendo un cortometraje en la web.

Ningún fan del terror puede perderse esta película, aunque hay que volver a avisar: es terriblemente seria, dramática y sobre todo fuerte, justificando totalmente la ya casi olvidada calificación "solo para mayores de 18 años".