Porno para principiantes

Crítica de Matías Asenjo - Sin Intervalos

Piroyanski-Furtado: Una dupla bien dotada en “PORNO PARA PRINCIPIANTES”.

Montevideo 1985. Víctor (Martín Piroyanski), un aficionado al cine, decide vender su cámara para poder casarse. Frustrado por sus sueños relegados y un suegro que pareciera querer el control de su pareja, se cruza con un dudoso empresario el cual le ofrece dirigir una película porno por una buena suma. Pero no estará sólo en esta incursión al género, en su afán de llevar a cabo esta versión erótica de "La Novia de Frankenstein" y hacer coexistir el arte con las demandas sexuales de sus productores, contará con su amigo Aníbal (Nicolás Furtado), un empleado de videoclub con una extensa base de datos mental en el rubro XXX lo acompañará en la misión. Todo se complicará aún más cuando Víctor se enamora de su protagonista, Ashley Cummings (Carolina Mânica), una estrella del porno internacional.

Hay películas que son buenas películas en su género. Y otras que trascienden el género y son sencillamente buenas películas. Carlos Ameglio nos trae no sólo una comedia sino una buena película. Un gran trabajo de arte, un sentido narrativo cinematográfico y una buena fotografía son algunos elementos que podremos encontrar en esta cinta.

En materia de humor, nos trae del bueno. A veces absurdo, a veces sutil. Guiado por una buena dirección dónde el humor principalmente radica en personajes verosímiles en situaciones inverosímiles.

Para que esto funcione un gran sostén se basa en el buen trabajo actoral, en especial del dúo protagonista. Marín Piroyanski se desenvuelve con la naturalidad de quien conoce el terreno a la perfección como si fuera una de sus propias películas. Por su parte Nicolás Furtado ya consagrado, luego de su entrañable Diosito, funciona de gran manera en la construcción de un personaje que resulta tentador sobreactuarlo y sin embargo lo mantiene en la justa medida.

Si bien la temática y la historia ya han sido abordadas, esta pieza no se siente como algo ya visto. El sello propio del director se hace presente invitándonos a un viaje de disfrute a la vez que nos invita a reflexiones como el anhelo por seguir nuestros sueños, aquellos mandatos sociales que atentan contra nuestra felicidad y la eterna lucha entre hacer coexistir un hecho artístico con las demandas comerciales entre otras.

“PORNO PARA PRINCIPIANTES” poco tiene de principiante, puesto que es un trabajo realizado con madurez al servicio de nuestro disfrute.
Por Matías Asenjo