Plumíferos

Crítica de Adolfo C. Martinez - La Nación

Aventuras de varios emplumados

Plumíferos, aventuras voladoras, una incursión argentina en la animación digital

Por primera vez la cinematografía nacional incursiona con este film en la animación digital, y lo hace a través de una divertida y cálida historia protagonizada por un grupo de plumíferos que habitan una gran ciudad. El personaje central es Juan, un simple gorrión callejero con enormes habilidades para volar, de lo que hace gran alarde, y con un sueño inalcanzable: ser un pájaro exótico. Feifi, por su parte, es un canario hembra que vive en cautiverio y anhela ser libre para poder disfrutar de la vida silvestre.

Su dueño, el señor Puertas, es un obsesivo magnate de la industria del software que, junto con sus dos forzudos guardaespaldas, no tolera que su trabajo se salga de control aunque, paradójicamente, es un error en su sistema lo que permite que Feifi escape y, en libertad, comparta con Juan y sus amigos -el murciélago hembra Clarita, el colibrí Pipo y la gorda paloma Libia- alegres aventuras, y también peligros, en la ciudad.

Un gato torpe es el principal enemigo de Juan y cuando éste queda atrapado en un galpón será su habilidad la que le permitirá escapar de las garras gatunas. También este gorrión es ambicioso, ya que desea ganar una carrera con sus pares y, además, un inoportuno teñido de pintura lo convierte en un pájaro muy distinto de los demás. Feifi, algo perdida tras su libertad, se encuentra con Juan y aquí comenzará un romance que deberá atravesar numerosas dificultades.

El director Daniel De Felippo, con la codirección de Gustavo Gianinni, lograron un film que cautiva por sus impecables dibujos, por la gracia de sus personajes y por una banda musical de alegre ritmo, a lo que deben sumarse las voces de los actores (Mariano Martínez, Luisana Lopilato, Carla Peterson y Mike Amigorena, entre otros) que lograron dar vida a ese grupo de plumíferos deseosos de lograr la felicidad y el placer.